Bendecir no es sólo decir una palabra, conlleva muchas otras cosas en el área afectiva y va a impactar de generación a generación.
Recibir el amor paterno de forma correcta en nuestra niñez es de gran influencia más adelante en nuestro comportamiento con los demás. La aceptación, el amor y el afecto crean estabilidad emocional y si no han sido recibidas de manera correcta, se generan cadenas generacionales.
Dios nos ha Bendecido para poder bendecir a los demás.
Dios te ama y quiere convertir las maldiciones en Bendiciones y la manera en que El lo hace es a través de su hijo, Jesús es el agua viva en nuestras vidas.
Veámos 5 Elementos que nos ayudan a Bendecir:
El Toque significativo: El toque físico hacia nuestros hijos, esposo(a) y familia de 8 a 10 veces al día genera una seguridad y es significado de Bendición, de acuerdo con el afecto que lo hagas. Es tan importante que puede sanar (Marcos 1:40-42)
Un mensaje hablado: Una Bendición cumple su propósito cuando es expresada en palabras, ya sea verbalmente o por escrito. Esa Bendición será transmitida de generación a generación. Mucho cuidado con lo que hablamos, podemos maldecir si no pensamos lo que vamos a decir (Santiago 3:5-6)
Darle un valor alto al que está siendo Bendecido: Al Bendecir, lo que digo tiene que realmente contener palabras de vida (Génesis 27:27).
Anticiparle un futuro especial: Palabras con un deseo de futuro y esperanza, deseando un buen porvenir (Juan 14:2-3)
El compromiso activo: La Bendición debe estar apoyada con un sacrificio (Génesis 28:13)
Dios nos ha dado a escoger entre la vida y la muerte, entre Bendición y maldición, si escogemos la Bendición, Bendecimos a nuestras generaciones y desatámos bendiciones sobre ellas.
Si deseas profundizar más en el tema puedes dirigirte al enlace y escuchar la palabra que nos compartió nuestra pastora Sandy Chonillo el Domingo 17 de Enero 2021.
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